Detectamos y reparamos fugas de agua utilizando tecnología avanzada que minimiza la necesidad de obras. Gracias a métodos no invasivos, podemos localizar con precisión el punto exacto de la fuga, incluso si está dentro de una pared o bajo el suelo.
¿Cómo lo hacemos? Empleamos un sistema de ultrasonido —similar a un sonar— que “escucha” las tuberías para detectar el escape de agua. Una vez localizada la fuga, en muchos casos podemos introducir un rodillo especial dentro de la tubería que aplica una resina azul. Esta resina se adhiere a las paredes internas y forma un nuevo recubrimiento que sella la fuga desde dentro.
Cuando la situación lo requiere, también realizamos intervenciones con obra para reparar o sustituir los elementos dañados. Siempre evaluamos la solución más eficiente, segura y duradera en cada caso.

